28.3.15

Somos motitas dentro de otras motitas

El ser humano debajo siempre de sus astros dioses, de la Luna y el Sol, siendo tierra que soporta todo. 

¿O en cambio somos los que en realidad quedamos soportados hasta que los astros nos venzan y se nos apoderen? 

Nos creemos grandes pero en realidad somos diminutas motas de polvo. Y lo curioso es que a nuestro alrededor todavía vemos muchas más diminutas motas de polvo. 

¿Quién nos asegura que dentro de esas motitas de polvo que flotan en el aire no hay millones de personas habitando dentro?

27.3.15

Tras el cristal se escondía esta naturaleza magenta

Detrás de un cristal me encontré esta delicada muestra magenta de la naturaleza domada. Parece japonesa pero en ese momento era simplemente catalana. O no. Seguramente no tendría dueño aunque se hubiea comprado en Barcelona.

16.3.15

Nada es sucio si antes has optado por verlo limpio

Nada es sucio si antes has optado por verlo limpio. ¿Te ha pasado que tú veías sucio algo que otros creían maravillosamente limpio? ¿Quién estaba equivocado? Disfruta y elije

El fuego doblega intenciones, dejando curvas sensuales

El fuego doblega intenciones, dejando curvas sensuales que nos muestras que lo liso es realmente asqueroso. Entre los recovecos vamos escondiendo las molestias.

10.3.15

No te preguntes por qué. Pero este lugar te atrapa

Hay lugares sagrados en sí mismos, sitios en donde se sabe que dentro hay algo más que un enorme espacio religioso o arquitectónico. Hay historia pero sobre todo luz o tinieblas, silencio sonoro o música ancestral. Hay lugares que atrapan aunque vayas decenas de veces a incorporarte a su interior. Da igual si eres religioso, creyente, ateo o agnóstico, el ambiente atrapa y se te lleva durante su estancia. Santa María del Mar en Barcelonaes un lugar para perderse unos minutos. No te preguntes por qué.

Los líderes mundiales se miran sus potencias

Los líderes del mundo tienes sus debilidades y sus tamaños. Y sus miserias, sin duda. El fotógrafo Edy Hardjo "Hrjoe" ha sabido captar el momento preciso en el que los mundiales mandamases, se miran sus vergüenzas y se miden sus fuerzas. Sin sorpresas. Todos nos conocemos bien.